Varios países occidentales reconocen al Estado palestino antes de la reunión de la ONU, pero expertos dicen que una misión de paz de la ONU en Gaza sigue siendo improbable debido al veto estadounidense.

Crisis de Gaza en el centro de la Asamblea General de la ONU
Mientras los líderes mundiales se reúnen en Nueva York para el 80° período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el conflicto persistente en Gaza domina la agenda internacional. Varios países occidentales, incluidos el Reino Unido, Canadá, Australia y Portugal, han anunciado su reconocimiento del Estado palestino en vísperas de la reunión, y se espera que Francia haga lo mismo durante una sesión especial de la ONU sobre la solución de dos Estados.
Aumenta la presión diplomática sobre Israel
Los esfuerzos coordinados de reconocimiento representan una escalada diplomática significativa destinada a presionar a Israel para que ponga fin a sus operaciones militares en Gaza. "El reconocimiento consolida tanto la posición legal como política de Palestina a nivel internacional," explica André De Hoogh, profesor de derecho internacional en la Universidad de Groningen. "Aumenta lentamente la presión sobre Israel."
Misión de paz improbable a pesar de los llamados
A pesar de los crecientes llamados a la intervención militar, los expertos coinciden en que el despliegue de fuerzas de paz de la ONU en Gaza sigue siendo muy improbable. Estados Unidos, como miembro permanente del Consejo de Seguridad, tiene poder de veto que probablemente bloquearía cualquier propuesta de este tipo. "Si la ONU quiere utilizar ese mecanismo, prácticamente solo puede hacerlo a través del Consejo de Seguridad, donde Estados Unidos, como miembro permanente, tiene el derecho de veto," dice Tom Buitelaar, profesor de Guerra, Paz y Justicia en la Universidad de Leiden.
Obstáculos legales y políticos
La estructura del derecho de veto del Consejo de Seguridad de la ONU hace que una intervención significativa sea un desafío. Aunque la Resolución 377 (la resolución "Unidos por la Paz") permite teóricamente a la Asamblea General sortear un punto muerto en el Consejo de Seguridad, la implementación práctica enfrenta numerosos obstáculos. Los países occidentales muestran poco entusiasmo por aportar tropas, e Israel probablemente resistiría cualquier acción militar de la ONU.
Enfoques alternativos y perspectivas futuras
Los expertos sugieren que las sanciones y el aislamiento diplomático pueden resultar más efectivos que la intervención militar. Jan Aart Scholte, profesor de Política Global en la Universidad de Leiden, enfatiza que "si la Unión Europea, las empresas y el público en general también se manifiestan con más fuerza, entonces con presión multilateral posiblemente se pueda lograr más." El camino a seguir sigue siendo incierto mientras la comunidad internacional lucha por encontrar mecanismos efectivos para abordar la crisis humanitaria en curso.