
Los costos de los funerales en Ucrania han aumentado drásticamente, mientras el país sufre grandes pérdidas en el frente, según informa Radio Free Europe/Radio Liberty. El número de tumbas disponibles en los cementerios ha disminuido considerablemente, y los costos de los funerales se han disparado. 'Antes de la guerra, un funeral costaba entre 190 y 215 dólares, ahora cuesta alrededor de 360 dólares'. Mientras tanto, funcionarios corruptos están obteniendo grandes ganancias con los funerales.
El alto número de muertes en la guerra en Ucrania no solo ha provocado una escasez de espacios disponibles en los cementerios en todo el país, sino también costos exorbitantes para las familias en duelo. Desde la invasión rusa, oficialmente han muerto 31.000 militares ucranianos, aunque investigaciones exhaustivas sugieren que la cifra real ronda los 74.000 muertos (además de 61.000 desaparecidos y 6.000 prisioneros de guerra).
Como resultado, los cementerios en todo el país están alcanzando su capacidad máxima, según RFE/RL. 'Gestionamos seis cementerios. De los seis, cinco están cerrados', dijo Ihor Sereda, propietario de una funeraria en las afueras de Kyiv. 'Esto significa que ya no hay cementerios disponibles'. Además, los costos de los funerales han alcanzado niveles sin precedentes, según Sereda.
Las familias de los ucranianos fallecidos reciben ayuda en muchos casos de las oficinas administrativas locales o (en el caso de los militares) del comisariado militar, pero los costos siguen siendo altos. Los aumentos de precios son especialmente notorios en grandes ciudades como Kyiv, donde la mayoría de los cementerios ya no aceptan nuevos entierros.
La situación es menos grave fuera de las grandes ciudades, donde hay más tierra disponible para expandir los cementerios, y estos no están rodeados de terrenos privados.
Mientras tanto, los funerales se han convertido en una fuente de ingresos lucrativa para funcionarios corruptos en Ucrania, según el Wall Street Journal. Algunas funerarias pagan a funcionarios para asegurar grandes contratos de transporte o entierro de militares fallecidos. Además, las funerarias cobran de más a los municipios por lápidas y ataúdes para soldados y luego comparten la diferencia con los funcionarios, según informa la policía ucraniana.