Un ataque aéreo israelí en una escuela de Gaza dejó 31 muertos, mientras el director de una polémica organización de ayuda dimitió. La ayuda que llega a Gaza es limitada, pero la necesidad sigue siendo alta.

Al menos 31 personas murieron en un ataque aéreo israelí contra una antigua escuela en la ciudad de Gaza, según informaron funcionarios locales de salud. También se registraron al menos 55 heridos. La escuela, ubicada en el barrio de Daraj, se utilizaba como refugio para desplazados. El edificio fue alcanzado tres veces por proyectiles, lo que provocó un incendio. Entre las víctimas hay muchas mujeres y niños.
El ejército israelí afirma que el edificio albergaba un puesto de mando de Hamás y la Yihad Islámica, pero no proporciona pruebas.
Mientras tanto, Jake Wood, director de la recién creada Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), ha dimitido debido a violaciones de los principios humanitarios. La GHF, respaldada por Israel y EE.UU., debía reemplazar a las organizaciones de ayuda existentes. Otras ONG se niegan a colaborar debido a preocupaciones sobre neutralidad y acceso.
Israel permitió recientemente la entrada de 107 camiones de ayuda en Gaza, pero las organizaciones humanitarias afirman que esto es insuficiente para abordar la creciente hambruna y crisis médica.