El presidente surcoreano advierte que la redada de EE.UU. en una fábrica de baterías Hyundai-LG podría disuadir inversiones coreanas debido a problemas de visados y diferencias culturales.

Tensiones diplomáticas tras redada migratoria a gran escala
El presidente surcoreano Lee Jae Myung ha expresado serias objeciones sobre una reciente redada migratoria estadounidense en una fábrica de baterías Hyundai-LG en Georgia, que podría afectar las inversiones coreanas en EE.UU. La redada del 4 de septiembre de 2025 resultó en la detención de más de 300 ciudadanos surcoreanos.
Operación de aplicación sin precedentes
La operación, descrita por las autoridades estadounidenses como la mayor acción de aplicación migratoria en un solo lugar en la historia reciente, se centró en empleados de la joint venture de $4.300 millones HL-GA Battery Company entre Hyundai y LG Energy Solution. Las instalaciones en Ellabell, Georgia, representan un componente crucial de la estrategia de vehículos eléctricos de Estados Unidos.
El presidente Lee declaró durante una conferencia de prensa: 'Las empresas surcoreanas en EE.UU. deben estar ahora desconcertadas. Los empleados detenidos tenían pocas opciones además de ingresar al país con visa B-1 o mediante exención de visa para visitas comerciales temporales.'
Complejidad de visados e impacto empresarial
El presidente enfatizó que problemas similares persistirán a menos que EE.UU. aborde la complejidad de los visados y expanda las cuotas para trabajadores temporales. 'Una fábrica necesita técnicos para trabajos de instalación, pero no son empleos permanentes. Ningún técnico estadounidense puede realizar este trabajo,' explicó Lee.
Según las últimas actualizaciones, 316 surcoreanos y 14 no coreanos saldrían el jueves de los centros de detención para regresar a Corea del Sur el viernes. La Casa Blanca habría ordenado una pausa en el proceso de liberación durante las negociaciones sobre procedimientos de transporte.
Intentos de solución diplomática
El ministro de Relaciones Exteriores Cho Hyun anunció que Seúl y Washington han acordado establecer un grupo de trabajo para un nuevo tipo de visa específicamente para trabajadores técnicos surcoreanos. Esta iniciativa busca prevenir incidentes similares en el futuro.
El presidente Lee señaló diferencias culturales en la aplicación migratoria: 'Los estadounidenses ingresan como turistas y enseñan inglés. Nosotros pensamos "Está bien". Pero allí parecen pensar "Absolutamente no".'
El incidente plantea preguntas sobre el equilibrio entre la aplicación migratoria y el mantenimiento de relaciones comerciales internacionales positivas, especialmente cuando EE.UU. busca fortalecer su capacidad de producción nacional en industrias estratégicas.