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Un reloj de bolsillo de oro del pasajero del Titanic Isidor Straus fue vendido por 1,78 millones de libras, estableciendo un nuevo récord para la memorabilia del Titanic. El reloj se detuvo exactamente cuando el barco se hundió en 1912.
Subasta histórica establece récord para memorabilia del Titanic
Un reloj de bolsillo de oro que perteneció a Isidor Straus, uno de los pasajeros más ricos a bordo del fatídico RMS Titanic, fue subastado por la asombrosa cifra de 1,78 millones de libras (aproximadamente 2 millones de euros), estableciendo un nuevo récord mundial para la memorabilia del Titanic. El reloj Jules Jurgensen de 18 quilates, que dejó de funcionar exactamente a las 02:20 horas del 15 de abril de 1912 - el momento en que el Titanic desapareció bajo el Océano Atlántico - fue vendido por la casa de subastas británica Henry Aldridge & Son en Devizes, Wiltshire.
La trágica historia detrás del reloj
Isidor Straus, nacido en Baviera y copropietario de la famosa tienda por departamentos Macy's con su hermano Nathan, viajaba en primera clase con su esposa Ida cuando el Titanic chocó contra un iceberg en su viaje inaugural. La pareja, casada durante 41 años, se convirtió en un símbolo de amor duradero cuando Ida supuestamente rechazó un lugar en un bote salvavidas y eligió quedarse con su marido. "Donde tú vayas, yo iré," se dice que le dijo, según relatos de supervivientes documentados por CNN.
El reloj en sí tiene una rica historia. Originalmente fue un regalo para el 43 cumpleaños de Isidor por parte de Ida en 1888, grabado con sus iniciales y representativo de su largo matrimonio. Cuando el Titanic se hundió, cobrándose la vida de más de 1.500 personas, el cuerpo de Isidor fue recuperado días después con el reloj todavía en su posesión. El cuerpo de Ida nunca fue encontrado.
Reliquia familiar sale al mercado
Durante 113 años, el reloj de bolsillo de oro permaneció en la familia Straus, cuidadosamente conservado a través de generaciones. Un bisnieto de Isidor Straus hizo restaurar y reparar profesionalmente el reloj antes de decidir subastarlo. La casa de subastas había estimado que el reloj alcanzaría entre 800.000 y 1 millón de libras, pero la oferta superó rápidamente las expectativas.
"Esto es más que un simple reloj - es una pieza tangible de una de las historias de amor más famosas de la historia," dijo Andrew Aldridge de Henry Aldridge & Son. "El hecho de que se detuviera en el momento exacto en que el Titanic se hundió le da una cualidad casi espiritual que los coleccionistas encuentran irresistible."
Venta récord y tendencias del mercado
El precio de 1,78 millones de libras casi duplica el récord anterior para la memorabilia del Titanic, establecido el año pasado cuando el reloj del capitán Arthur Rostron - quien rescató a 700 supervivientes del Titanic - fue vendido por 1,87 millones de euros. La subasta total de artículos relacionados con el Titanic alcanzó los 3 millones de libras, incluyendo una carta escrita por Ida Straus en papel membretado del Titanic que se vendió por 100.000 libras.
La fascinación perdurable por los artefactos del Titanic continúa impulsando los precios a alturas sin precedentes. Como informó BBC News, "La historia de los Straus es considerada 'la historia de amor definitiva' porque Ida se negó a abandonar a su marido de 41 años y eligió morir a su lado en lugar de ocupar un lugar en un bote salvavidas."
El desastre del Titanic, que ocurrió cuando el barco chocó contra un iceberg en el Atlántico Norte, sigue siendo uno de los desastres marítimos en tiempos de paz más mortíferos de la historia, con aproximadamente 1.635 víctimas mortales. La tragedia llevó a cambios significativos en las regulaciones de seguridad marítima, incluido el establecimiento del Convenio Internacional para la Seguridad de la Vida Humana en el Mar (SOLAS) en 1914.
Patrimonio cultural y retrato cinematográfico
La devoción de la pareja Straus fue inmortalizada en la película de éxito de James Cameron Titanic de 1997, donde fueron representados abrazándose en la cama mientras el agua llenaba su camarote. Aunque la representación cinematográfica los mostró en su camarote, los relatos históricos de supervivientes indican que fueron vistos juntos por última vez en la cubierta, tomados de la mano mientras el barco se hundía.
La venta récord demuestra que, más de un siglo después de la tragedia, la fascinación pública por el Titanic y sus pasajeros sigue siendo tan fuerte como siempre. Como señaló un coleccionista, "Estos artefactos no son solo objetos - son conexiones con personas reales e historias reales que continúan resonando a través de generaciones."
