Operación policial más letal de Brasil genera indignación internacional
El número de muertos de una operación policial masiva contra cárteles de drogas en Río de Janeiro ha aumentado a 132 personas, según el defensor público del estado de Río. La operación, con nombre en clave "Operación Detención", se centró en la poderosa organización criminal Comando Vermelho (Comando Rojo) en los complejos de favelas de Penha y Alemão, considerados bastiones de la pandilla.
Violencia sin precedentes y testimonios de civiles
La operación involucró a aproximadamente 2,500 oficiales de policía y resultó en lo que los residentes describieron como asesinatos similares a ejecuciones. Los testigos informaron haber encontrado víctimas que habían recibido disparos en la nuca, estaban atadas y mostraban quemaduras. "El impacto aquí en Río también sigue siendo fuerte, un día después del drama. Que se haya causado tal masacre durante esta operación antidrogas y que los residentes aún encuentren muchos cuerpos en las colinas alrededor de los barrios es algo sin precedentes en la historia de las operaciones antidrogas en esta ciudad," dijo Nina Jurna, corresponsal de América Latina.
Los residentes descubrieron durante la noche al menos 70 cuerpos adicionales en bosques cercanos, que fueron colocados en plazas públicas para identificación por parte de familiares. El informe policial oficial confirmó 119 muertes, incluidos cuatro oficiales de policía, mientras que el defensor público documentó 132 muertes. La diferencia en los números ha generado preocupaciones sobre transparencia y rendición de cuentas.
Operación a escala militar y tácticas
La operación incluyó vehículos blindados, helicópteros y drones en lo que parecía más una guerra militar que la aplicación tradicional de la ley. Los narcotraficantes respondieron con tácticas avanzadas, utilizando drones para lanzar granadas contra equipos policiales y creando barricadas con camiones y neumáticos en llamas. Los intensos tiroteos duraron más de doce horas, lo que los residentes describieron como un "teatro de guerra y barbarie".
"También hay gran indignación y críticas al gobernador de Río que justifica esta forma sangrienta de lucha contra las drogas, mientras que para muchos residentes se siente como ejecuciones públicas," agregó Jurna.
Condena internacional y consecuencias políticas
Las Naciones Unidas expresaron su horror por la violencia y pidieron investigaciones rápidas. La oficina de Derechos Humanos de la ONU condenó la brutalidad de la operación, con aproximadamente 30 organizaciones de derechos humanos firmando una declaración que afirmaba que "la seguridad no se logra con sangre".
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, supuestamente estaba "aturdido" por el número de muertos y sorprendido de que la operación se lanzara sin el conocimiento del gobierno federal. El gobierno federal ha enviado una delegación para conversar con el gobernador de Río, Cláudio Castro, quien defendió la operación como un éxito a pesar de las numerosas víctimas.
Contexto histórico y crisis de seguridad
Esta operación supera las operaciones policiales mortales anteriores en Río, incluida la redada en Jacarezinho en 2021 que dejó 28 muertos y la operación en Penha en 2022 con 23 muertes. El Comando Vermelho, que surgió en los años 70 como una alianza carcelaria entre criminales comunes y guerrilleros de izquierda, se ha convertido en una de las organizaciones criminales más poderosas de Brasil.
"El drama también expone que la seguridad está en juego. Porque los cárteles de drogas y las milicias armadas han ido ganando cada vez más territorios en los últimos años, y ahora dominan más del 60 por ciento de los barrios en Río," explicó Jurna. "También prevalece la crítica de que las autoridades han dejado que esto siga su curso durante demasiados años y no llevan a cabo una lucha efectiva y sostenible contra el crimen organizado."
La operación ocurrió pocos días antes de que Brasil organice la cumbre climática mundial de la ONU (COP30) en la Amazonía, con actividades relacionadas también planificadas en Río, lo que plantea preguntas sobre el momento y las motivaciones detrás de la operación policial masiva.