Creciente Amenaza Zoonótica en los Trópicos Exige Acción Urgente

Una nueva investigación revela un aumento en los riesgos de brotes de enfermedades zoonóticas en regiones tropicales debido a cambios ambientales. Los expertos abogan por una mejor vigilancia, políticas de uso de la tierra y coordinación bajo el enfoque de 'Una Sola Salud'.

creciente-amenaza-zoonotica-tropicos-accion-urgente
Image for Creciente Amenaza Zoonótica en los Trópicos Exige Acción Urgente

Nueva Investigación Muestra Mayor Riesgo de Brotes en Zonas Tropicales

Un nuevo y extenso análisis revela que las regiones tropicales de todo el mundo enfrentan riesgos crecientes de brotes de enfermedades zoonóticas, lo que lleva a los científicos a pedir inversiones inmediatas en sistemas de vigilancia, reformas en las políticas de uso de la tierra y una mejor coordinación de 'Una Sola Salud'. Los hallazgos llegan en un momento en que el cambio climático y la deforestación aceleran las interacciones entre humanos y vida silvestre, creando condiciones perfectas para que los patógenos salten de animales a humanos.

'Estamos viendo una tormenta perfecta de cambio ambiental, destrucción de hábitat e invasión humana en áreas de vida silvestre,' dice la Dra. María Rodríguez, epidemióloga del Instituto de Salud Global que contribuyó a la investigación. 'Los datos muestran claramente que sin una acción coordinada, nos estamos preparando para brotes de enfermedades más frecuentes y graves.'

La Ciencia Detrás del Riesgo Creciente

La investigación, publicada en la revista One Earth en agosto de 2025, analizó 312 estudios sobre 39 patógenos y enfermedades diferentes. El hallazgo alarmante fue que solo el 7,4% de las evaluaciones de riesgo actuales integran los tres componentes esenciales: peligro, exposición y vulnerabilidad. La mayoría de los estudios (52%) se centran únicamente en la evaluación de peligros, lo que genera brechas críticas en la comprensión de cómo las enfermedades realmente se propagan a las poblaciones humanas.

La composición del paisaje y la temperatura surgieron como las principales variables ambientales para la transmisión de enfermedades. Las regiones tropicales, con su alta biodiversidad, climas cálidos durante todo el año y rápidos cambios en el uso de la tierra, son particularmente vulnerables. La deforestación para la agricultura y la urbanización fragmenta los hábitats, acercando a las personas a la vida silvestre y sus patógenos.

'Cuando talas un bosque para plantaciones de palma aceitera o ganadería, no solo estás eliminando árboles,' explica el Dr. James Chen, investigador en salud ambiental. 'Estás alterando ecosistemas completos y forzando a los animales—y las enfermedades que portan—a trasladarse a paisajes dominados por humanos. Es una receta para la emergencia de enfermedades.'

El Déficit de Vigilancia

Los sistemas actuales de vigilancia de enfermedades en muchos países tropicales están subfinanciados y fragmentados. La Organización Mundial de la Salud estima que aproximadamente el 60% de las enfermedades infecciosas conocidas y el 75% de las enfermedades infecciosas emergentes son de origen animal, pero las capacidades de detección siguen siendo inadecuadas en muchas áreas de alto riesgo.

El proceso de Priorización de Enfermedades Zoonóticas de Una Sola Salud (OHZDP) de los CDC ha mostrado ser prometedor para ayudar a los países a identificar sus principales amenazas zoonóticas a través de talleres colaborativos. Sin embargo, la implementación de sistemas de vigilancia basados en estas prioridades requiere financiación sostenida y compromiso político que a menudo falta.

'Tenemos las herramientas y el conocimiento para construir sistemas de alerta temprana efectivos,' dice la Dra. Amina Diallo, especialista en salud pública que trabaja en África Occidental. 'Lo que nos falta es inversión consistente y la voluntad política para mantener estos sistemas entre brotes. Es como comprar un seguro contra incendios solo cuando tu casa ya está en llamas.'

Política de Uso de la Tierra: Una Palanca Crucial

La investigación destaca que la política de uso de la tierra es una de las herramientas más poderosas para prevenir la emergencia de enfermedades zoonóticas. Un estudio publicado en Bioscience subraya cómo los cambios ambientales causados por el hombre—deforestación, urbanización, expansión agrícola—crean condiciones que facilitan la transmisión de enfermedades entre la vida silvestre, el ganado y los humanos.

Los expertos abogan por políticas que conserven corredores de vida silvestre, protejan bosques intactos y regulen la expansión agrícola en ecosistemas sensibles. 'Tenemos que ir más allá de ver los bosques solo como madera o tierra para desarrollo,' dice la analista de políticas ambientales Sarah Johnson. 'Son infraestructura crucial de salud pública. Protegerlos es más barato que lidiar con brotes pandémicos.'

El Imperativo de Una Sola Salud

El enfoque de Una Sola Salud, que reconoce la interconexión de la salud humana, animal y ambiental, se ve cada vez más como esencial para abordar estos desafíos complejos. Las Organizaciones Cuatripartitas—FAO, OMS, WOAH y PNUMA—han promovido este marco integrado, pero la implementación a nivel nacional y local sigue siendo inconsistente.

'Una Sola Salud no es solo un concepto bonito—es una necesidad práctica,' afirma el Dr. Robert Kim, director de una iniciativa de Una Sola Salud en el Sudeste Asiático. 'Cuando los veterinarios, médicos, ecólogos y legisladores trabajan en silos, perdemos las conexiones que conducen a brotes de enfermedades. Necesitamos una vigilancia integrada que monitoree simultáneamente la salud de la vida silvestre, las enfermedades del ganado y las enfermedades humanas.'

La investigación pide un cambio de estrategias reactivas a preventivas, con una mejor integración de datos ambientales en la planificación de salud pública. Esto incluye desarrollar nuevos indicadores para la evaluación del riesgo de enfermedades que tengan en cuenta los cambios en el uso de la tierra, los patrones climáticos y la pérdida de biodiversidad.

Camino a Seguir

Los científicos recomiendan varias acciones inmediatas: aumentar la financiación para sistemas de vigilancia integrados en regiones tropicales, desarrollar políticas de uso de la tierra que consideren la prevención de enfermedades, fortalecer los mecanismos de coordinación de Una Sola Salud y desarrollar capacidades para profesionales de la salud locales.

'La pandemia de COVID-19 nos mostró los costos devastadores de no estar preparados,' concluye la Dra. Rodríguez. 'Tenemos una ventana de oportunidad para construir sistemas de salud más resilientes que puedan prevenir la próxima pandemia, no solo reaccionar ante ella. La ciencia es clara—invertir en prevención ahora salvará vidas y recursos a largo plazo.'

A medida que las regiones tropicales continúan experimentando un rápido cambio ambiental, crece la urgencia de abordar los riesgos de enfermedades zoonóticas. La investigación sirve tanto como advertencia como hoja de ruta para crear relaciones más saludables y sostenibles entre las personas, los animales y sus entornos compartidos.

También te puede interesar