El jefe de la OTAN, Rutte, discute con Trump un nuevo plan en el que los países de la OTAN financian y distribuyen armas estadounidenses a Ucrania, durante un prometido cambio de política de Trump sobre apoyo militar.

Reunión clave sobre apoyo militar a Ucrania
El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, mantiene hoy una reunión crucial con el presidente estadounidense Donald Trump en Washington sobre el envío de armas a Ucrania. Según fuentes de la OTAN, las conversaciones se centrarán en la propuesta de Trump de que los países de la OTAN financien los envíos de armas y gestionen su distribución a Ucrania.
Anuncio esperado de Trump
El presidente Trump ha anunciado que hoy hará un "comunicado importante" sobre Rusia, aunque no está claro si está directamente relacionado con las negociaciones sobre armas. Este encuentro es su primera conversación en persona desde la cumbre de la OTAN el mes pasado en La Haya.
Agenda diplomática amplia
Durante su visita a Washington, Rutte también se reunirá con el secretario de Estado Marco Rubio y el secretario de Defensa Dan Hegseth, así como con miembros del Congreso. Estas conversaciones tienen lugar en un contexto de tensas relaciones entre Estados Unidos y Rusia. Trump calificó su reciente llamada de una hora con Putin como "decepcionante" y afirmó: "No he avanzado ni un paso. Él no tiene intención de parar".
Cambio en la política estadounidense
Trump anunció recientemente un cambio de rumbo con un aumento en el envío de armas defensivas a Ucrania, a pesar de las objeciones del Pentágono sobre el agotamiento de las reservas estadounidenses. Esto marca un cambio significativo en la política después de dos suspensiones previas de ayuda. La corresponsal de la OTAN, Kysia Hekster, subraya: "Los aliados europeos llevan tiempo esperando un renovado apoyo estadounidense en armas, especialmente sistemas avanzados como los misiles Patriot que Europa no tiene".
Desafíos operativos
El plan propuesto haría que los países de la OTAN fueran responsables de financiar, recibir y distribuir las armas estadounidenses a Ucrania, una operación logística compleja. Este nuevo modelo sugiere que Estados Unidos busca una distribución más estructurada de cargas en el conflicto contra la invasión rusa en curso.