Evacuación masiva en icónico sitio Inca de Perú
Aproximadamente 900 turistas internacionales están atrapados en Machu Picchu después de que manifestantes locales bloquearan la línea ferroviaria hacia la antigua ciudadela inca. Las autoridades peruanas han comenzado evacuaciones de emergencia para los visitantes varados.
Disputa de transporte genera disturbios civiles
La crisis surgió por un conflicto sobre permisos de autobuses que ha dividido a la comunidad local. El permiso de la empresa de autobuses existente expiró recientemente y las autoridades adjudicaron el nuevo contrato a otro operador de un distrito adyacente. Esta decisión ha provocado indignación entre los residentes locales que consideran que el proceso de licitación fue opaco y excluyó injustamente a las empresas locales.
'La adjudicación se realizó de manera injusta y sin transparencia - las empresas locales deben beneficiarse del turismo hacia nuestras tierras ancestrales,' declaró un representante comunitario que prefirió permanecer en el anonimato por razones de seguridad.
Bloqueo ferroviario y confrontación policial
Los manifestantes han cerrado efectivamente el acceso a Machu Picchu colocando grandes rocas sobre las vías del tren, la principal ruta de transporte para turistas hacia el sitio Patrimonio Mundial de la UNESCO. El bloqueo ha impedido cualquier movimiento hacia y desde Aguas Calientes, dejando a los turistas atrapados sin opciones claras de salida.
La situación escaló cuando la policía intentó despejar las vías, lo que llevó a enfrentamientos con los manifestantes. Según informes oficiales, catorce agentes de policía resultaron heridos durante la confrontación en los intentos por restaurar el corredor de transporte vital.
Contexto histórico del turismo en Machu Picchu
Machu Picchu, construido en el siglo XV durante el reinado del emperador inca Pachacuti, se encuentra a aproximadamente 2.430 metros de altitud en la cordillera de los Andes. Desde su designación como Patrimonio Mundial de la UNESCO en 1983, esta maravilla arqueológica atrae a más de 1,5 millones de visitantes anuales, convirtiéndose en el destino turístico más visitado de Perú.
Esta no es la primera vez que se interrumpen las operaciones turísticas en el antiguo sitio. Protestas similares ocurrieron el año pasado cuando comunidades locales manifestaron contra la privatización de la venta de entradas, lo que ilustra las tensiones continuas entre el desarrollo turístico y los intereses económicos locales.
Las autoridades peruanas ya han evacuado a aproximadamente 1.550 turistas esta semana, mientras que los 900 visitantes restantes esperan arreglos de transporte de emergencia. La operación de evacuación incluye esfuerzos coordinados entre la policía nacional, funcionarios de turismo y autoridades locales para garantizar el regreso seguro de todos los turistas varados.