Crisis de bioseguridad por plaga invasora en productos para bebés
Las autoridades australianas luchan contra el tiempo para contener un potencial desastre de bioseguridad después de que se descubrieran larvas del escarabajo khapra en un envío de pañales de un fabricante belga. Esta plaga invasora, considerada como uno de los destructores de granos más destructivos del mundo, representa una grave amenaza para la industria de exportación de granos de Australia, valorada en miles de millones de dólares.
Catástrofe económica evitada
Funcionarios gubernamentales han lanzado un retiro de emergencia de aproximadamente 2.000 cajas de pañales que se vendían en supermercados de todo el país. 'Esto no se trata solo de productos para bebés: estamos hablando de proteger todo nuestro sector agrícola de una plaga que podría destruir nuestras exportaciones de granos,' declaró un portavoz de bioseguridad. Hasta ahora, se han recuperado 1.500 cajas, y las autoridades confirman que las 500 restantes no llegaron a zonas agrícolas.
La amenaza del escarabajo khapra
El escarabajo khapra (Trogoderma granarium) es nativo del sur de Asia y se encuentra entre las 100 peores especies invasoras del mundo. Estos escarabajos infectan el almacenamiento de granos, causan contaminación a través de excrementos, insectos muertos y daños por mordeduras que hacen que el grano sea inutilizable. Australia, como importante exportador de granos a China y otros mercados, podría enfrentar pérdidas de miles de millones si el escarabajo se establece.
Medidas estrictas de bioseguridad
Australia mantiene algunos de los controles de bioseguridad más estrictos del mundo, particularmente en lo que respecta a las importaciones agrícolas. El aislamiento del país ha protegido históricamente sus ecosistemas únicos de especies invasoras. La fábrica de pañales cerca de Sydney responsable de la distribución de los productos contaminados ha sido cerrada temporalmente mientras continúan las investigaciones.
Se ha pedido a los padres que sellen completamente las cajas de pañales en lugar de desecharlas, para que los equipos gubernamentales puedan recogerlas y ponerlas en cuarentena. Este no es el primer encuentro de Australia con el escarabajo khapra: el país erradicó con éxito una infestación en 2020, lo que demuestra la efectividad de sus protocolos de respuesta rápida.