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Escalada de protestas en Serbia
Las manifestaciones contra el gobierno del presidente Aleksandar Vučić han tomado un giro violento. Durante cinco noches consecutivas, se produjeron enfrentamientos entre manifestantes y la policía, lo que marca una clara escalada en las protestas que ya llevan nueve meses.
De pacíficas a violentas
Iniciadas por estudiantes que exigían cambios pacíficos, las protestas se centraron en nuevas elecciones debido a acusaciones de corrupción contra Vučić. En marzo, 300,000 personas se reunieron en Belgrado. La violencia reciente surgió tras denuncias de que manifestantes en Vrbas fueron atacados por simpatizantes del partido gobernante (SNS) sin intervención policial.
Acciones policiales y respuesta gubernamental
Bajo el lema 'No somos sacos de boxeo', manifestantes encapuchados destruyeron una oficina del SNS en Valjevo. La policía respondió con porras y gases lacrimógenos. Videos muestran presunta brutalidad policial, incluyendo maltrato y detención de menores, aunque no ha sido verificado de manera independiente.
Origen de la crisis
Las protestas comenzaron tras el colapso del techo de una estación en Novi Sad (noviembre 2024), que dejó 16 muertos, atribuido a corrupción en contratos gubernamentales para aliados de Vučić. Los manifestantes ahora exigen elecciones justas, supervisadas internacionalmente, debido a fraude electoral previo.
