Países Bajos deja de financiar el Centro Global de Adaptación tras acciones controvertidas del director y tensiones diplomáticas. Reino Unido también retira apoyo, amenazando el futuro de la organización.

Gobierno holandés retira apoyo al Centro Global de Adaptación
Países Bajos ha decidido dejar de financiar el Centro Global de Adaptación (GCA), una prestigiosa organización climática que fue llevada con orgullo a Rotterdam hace ocho años. La decisión, que entrará en vigor después del próximo año, marca un cambio significativo en la política climática holandesa.
Liderazgo controvertido y tensiones diplomáticas
El GCA, concebido como un centro global de conocimiento para la adaptación climática, enfrentó crecientes críticas debido a las acciones controvertidas de su director Patrick Verkooijen. La reputación de la organización se vio especialmente dañada por el discurso improvisado de Verkooijen durante una visita de Estado del rey Guillermo Alejandro y la reina Máxima a Kenia a principios de este año.
"En medio del caos, usted muestra un verdadero liderazgo, señor presidente. Le agradezco por eso," declaró Verkooijen durante la cena de Estado, donde elogió al presidente keniano William Ruto en un discurso que duró más que los de ambos jefes de Estado combinados.
Crisis de financiación internacional
Países Bajos y el Reino Unido proporcionaron conjuntamente aproximadamente la mitad de las donaciones al GCA el año pasado. Con ambos países retirando su apoyo y la Fundación Gates reconsiderando su financiación, la organización enfrenta una amenaza existencial. https://www.gca.org
El ex secretario general de la ONU Ban Ki-moon, presidente honorario de la junta directiva del GCA, ha hecho un llamamiento directo al gobierno holandés en funciones: "Estamos hablando de esto con otros países, por ejemplo Kenia. Pero sería mucho mejor permanecer en Países Bajos. Así que les pido que reconsideren esto."
Preocupaciones éticas y posible reubicación
El doble papel de Verkooijen como director del GCA y administrador de la Universidad de Nairobi ha generado preguntas éticas, especialmente después de que el GCA asignara contratos por valor de 1,2 millones de euros a la misma universidad. La organización ahora amenaza con trasladarse a Kenia si no se restaura la financiación holandesa.
El Ministerio de Infraestructura y Gestión del Agua, que originalmente estableció el GCA, insiste en que la decisión es puramente presupuestaria. Sin embargo, fuentes indican que los conflictos persistentes entre la organización y los ministerios holandeses contribuyeron a la retirada de la financiación.