
Estados Unidos ha eliminado regulaciones que limitaban la cantidad de chips de inteligencia artificial que las empresas estadounidenses podían vender a ciertos países. Estas normas fueron implementadas por el ex presidente Joe Biden para frenar el desarrollo de IA en otros países y mantener el liderazgo de EE.UU. en esta tecnología.
Las empresas de chips estadounidenses, como Nvidia, se oponían desde hace tiempo a estas restricciones. Según el periodista tecnológico Joe van Burik, estas reglas limitaban severamente el acceso de varios países a chips avanzados, algo que también criticaban empresas como Microsoft.
La administración de Trump argumentó que estas regulaciones asfixiaban la innovación estadounidense y perjudicaban las relaciones diplomáticas. Aunque se han levantado las restricciones, el gobierno aún busca formas de evitar que la tecnología caiga en manos de adversarios.
Países como China y Rusia siguen excluidos del mercado de chips estadounidense debido a sanciones existentes, especialmente para productos con posibles usos militares.
La noticia del levantamiento de las restricciones ha impulsado las acciones de empresas tecnológicas. Nvidia subió casi un 2% antes de la apertura del mercado, mientras que AMD y Micron también registraron alzas significativas.