Investigación del accidente de tranvía en Lisboa revela cable no certificado y fallos de mantenimiento que causaron 16 muertes. Cable no apto para transporte de personas, registros de mantenimiento falsificados.

Investigación revela múltiples fallos de seguridad en tragedia de tranvía de Lisboa
Una investigación preliminar sobre el mortal accidente de tranvía en Lisboa de septiembre ha revelado impactantes fallos de seguridad, incluido que el cable de acero que se rompió no estaba certificado para el transporte de pasajeros y no cumplía con las especificaciones del operador. El accidente del 3 de septiembre de 2025 cobró la vida de 16 personas e hirió a otras 21 cuando el cable que conectaba los dos vagones del histórico tranvía Glória se rompió poco después de la salida.
Equipamiento no certificado y errores de mantenimiento
La investigación realizada por la Oficina Portuguesa para la Prevención e Investigación de Accidentes en Aviación Civil y Ferrocarriles (GPIAAF) encontró graves errores en el cable, el mantenimiento y los frenos. El cable había estado en uso durante aproximadamente 11 meses y era del mismo tipo que se utilizaba en otros tranvías de cable de la capital portuguesa. 'El cable de conexión no era adecuado para el transporte de personas y se utilizaron componentes de montaje incorrectos,' afirmó el informe de investigación preliminar.
Registros de mantenimiento bajo escrutinio
La investigación reveló prácticas de mantenimiento preocupantes. 'Los trabajos de mantenimiento que estaban registrados no siempre se habían realizado,' según los hallazgos preliminares. La inspección del tranvía Glória el día del accidente también podría haber sido registrada incorrectamente, con evidencia que sugiere que 'la inspección no se realizó dentro del tiempo especificado.'
La empresa de transporte Carris había afirmado que se siguieron todos los protocolos de mantenimiento, incluyendo mantenimiento general cada cuatro años (último realizado en 2022), reparaciones intermedias cada dos años (última en 2024) e inspecciones regulares mensuales, semanales y diarias. Sin embargo, la investigación mostró que no siempre había supervisión de los trabajos de mantenimiento.
Fallaron los sistemas de emergencia
Los frenos del tranvía Glória funcionaban correctamente pero no eran lo suficientemente fuertes para detener el vagón descarrilado, que alcanzó velocidades de aproximadamente 60 kilómetros por hora antes de estrellarse contra un edificio. La sección donde se soltó el cable no podía ser inspeccionada sin detener el tranvía durante un tiempo prolongado y desmontar componentes.
Contexto histórico y recomendaciones de seguridad
El icónico tranvía Glória, inaugurado en 1885, ha sido una atracción turística popular en Lisboa durante 140 años. Este fue el segundo descarrilamiento en esta línea, después de un incidente en 2018 causado por problemas de mantenimiento de ruedas. El GPIAAF ha recomendado que otros ascensores y tranvías de cable históricos en Lisboa no circulen hasta que se verifiquen los cables y sistemas de frenos.
Un sindicato de transporte ha criticado fuertemente la externalización de los servicios de mantenimiento de Carris, argumentando que el mantenimiento debería ser realizado por personal de la empresa en lugar de mediante externalización impulsada por beneficios. Se espera que el informe final sobre el accidente se publique dentro de un año después del incidente.