China acelera el cierre de refinerías privadas de petróleo
China está acelerando el cierre de refinerías privadas de petróleo en medio de crecientes tensiones con Estados Unidos. Estas operaciones a pequeña escala, alguna vez alentadas por Pekín, ahora están siendo eliminadas debido a daños ambientales y presiones diplomáticas.
Importación de petróleo sancionado
Casi el 90% de las exportaciones de petróleo iraní en 2023 fueron a China, principalmente a través de refinerías privadas. Estas fábricas, conocidas como 'teteras', procesaban petróleo sancionado de Irán, Rusia y Venezuela a bajo costo, lo que ahorró miles de millones a China pero generó fricciones con Washington.
Presiones ambientales y económicas
La mayoría de las refinerías privadas utilizan tecnología obsoleta y contaminante, incompatible con los objetivos climáticos de China para 2060. La sobreproducción también se ha convertido en un problema debido al auge de los vehículos eléctricos. A principios de este año, Pekín eliminó beneficios fiscales, lo que obligó a muchas fábricas a cerrar.
Escalada de sanciones de EE.UU.
El mes pasado, Estados Unidos sancionó por primera vez a dos refinerías chinas. Esta acción sigue años de quejas diplomáticas sobre la evasión de China a los embargos internacionales de petróleo.
Cambio estratégico
China ahora considera estas operaciones privadas como una carga que socava a empresas estatales como Sinopec. Con los cierres, Pekín busca limitar el daño ambiental y eliminar un punto de conflicto en su tensa relación con Washington.
Las recientes sanciones estadounidenses se centran en los 'barcos sombra' iraníes que abastecen a las refinerías chinas. Los analistas confirman que las refinerías privadas chinas están reduciendo las importaciones de petróleo venezolano.