Bitcoin rompe récords por política cripto de Trump
El Bitcoin alcanzó un récord histórico de $124,000 el jueves, continuando su rally sin precedentes. Expertos financieros atribuyen este aumento a la política favorable a las criptomonedas del presidente Trump en Estados Unidos, advirtiendo que estos desarrollos podrían desencadenar una nueva crisis crediticia.
La agenda del presidente cripto
El presidente Trump, quien se autodenomina el 'presidente cripto', ha apoyado legislación que reduce la supervisión sobre las monedas digitales. La reciente aprobación por el Congreso de regulaciones para stablecoins —criptomonedas vinculadas a activos estables como el dólar estadounidense— busca minimizar la volatilidad e integrar las criptomonedas al sistema financiero tradicional.
Brecha bancaria global
Mientras las instituciones financieras estadounidenses invierten cada vez más en criptomonedas, los bancos europeos, como el ING de Países Bajos, mantienen su cautela. ING confirmó que actualmente prohíbe las inversiones en criptomonedas a través de sus plataformas, citando la excesiva volatilidad como principal riesgo.
Preocupaciones por una burbuja
"La creciente confianza de los inversores está inflando una burbuja cripto", declaró Annelieke Mooij, profesora de derecho público en la Universidad de Tilburg. "La pregunta crucial es si estallará abruptamente o de manera gradual". Los expertos comparan la situación con la crisis financiera de 2008, donde productos financieros complejos y mal entendidos contribuyeron al colapso del mercado.
Garantías europeas
Europa mantiene regulaciones más estrictas sobre criptomonedas para protegerse contra el fraude y el lavado de dinero. Aunque estas medidas fortalecen a los bancos de la UE, los expertos advierten que los mercados cripto globales siguen interconectados. Dennis Post de EY señaló: "Las deficiencias de transparencia en los mercados cripto de EE. UU. se asemejan a las condiciones previas a 2008, donde productos mal entendidos llevaron al fracaso del sistema".
Aunque no hay indicadores directos de crisis, las políticas de Trump aumentan los riesgos sistémicos. La regulación europea podría mitigar, pero no prevenir, posibles consecuencias de perturbaciones en el mercado estadounidense.