Programa de Estímulo de Semiconductores de EE.UU. Impulsa Construcción de Fábricas

Gran Expansión en la Producción de Semiconductores en EE.UU.

Estados Unidos está experimentando un crecimiento sin precedentes en inversiones para la producción de semiconductores, impulsado por el programa de estímulo CHIPS Act. Con más de $630 mil millones en inversiones privadas anunciadas en 130 proyectos en 28 estados desde 2020, el país está construyendo rápidamente su capacidad de producción de chips que había caído a solo el 10% de la producción mundial en 2022.

Créditos Fiscales Alimentan la Construcción de Fábricas

La piedra angular de este resurgimiento es el Advanced Manufacturing Investment Credit (AMIC), que ofrece un crédito fiscal del 25% para instalaciones de producción de semiconductores, aumentando al 35% para propiedades en uso después del 31 de diciembre de 2025. 'Este crédito fiscal fue absolutamente esencial para hacer económicamente viable la producción de semiconductores en EE.UU.,' dice la Dra. Sarah Chen, analista de políticas de semiconductores en la Information Technology and Innovation Foundation. 'Sin estos incentivos, construir fábricas en EE.UU. seguiría siendo 30-50% más caro que con los competidores asiáticos.'

El Departamento de Comercio ha otorgado $32,54 mil millones en subsidios y hasta $5,85 mil millones en préstamos a 32 empresas en 48 proyectos. Las inversiones notables incluyen la expansión de $105 millones de Analog Devices en tres ubicaciones, la instalación de producción de Carburo de Silicio de $225 millones de Bosch, y el proyecto de modernización DRAM de $275 millones de Micron.

Asociaciones Público-Privadas Impulsan la Innovación

El éxito del programa depende de asociaciones público-privadas avanzadas que combinan financiamiento gubernamental con la experiencia del sector privado. 'Estamos viendo un nivel sin precedentes de colaboración entre agencias gubernamentales y empresas de semiconductores,' señala Michael Rodriguez, director de la Iniciativa Nacional de Semiconductores. 'El gobierno proporciona la columna vertebral financiera mientras que las empresas aportan el conocimiento técnico y las conexiones de mercado.'

Los desarrollos recientes incluyen al gobierno estadounidense convirtiendo subsidios de semiconductores en una participación accionaria del 10% en Intel y una empresa conjunta preliminar entre Intel y TSMC para fortalecer la producción nacional de chips. Estos movimientos estructurales forman parte de una estrategia más amplia para asegurar las cadenas de suministro y alinear las operaciones comerciales con las prioridades de seguridad nacional.

Desarrollo de Fuerza Laboral e Impacto Económico

Se espera que el resurgimiento de semiconductores cree y respalde más de 500,000 empleos estadounidenses, incluyendo 69,000 empleos en instalaciones del ecosistema de semiconductores, 122,000 empleos de construcción, y más de 335,000 empleos adicionales en la economía en general. Los programas de desarrollo de fuerza laboral, especialmente a través de asociaciones con instituciones educativas como la Universidad Estatal de Arizona, ya han capacitado a más de 10,000 participantes en América del Norte.

'Los efectos de las ondas económicas son significativos,' explica María González, especialista en desarrollo económico. 'Cada trabajo directo en semiconductores crea aproximadamente 5,7 empleos adicionales en la economía en general. Estamos viendo comunidades transformadas por estas inversiones.'

Perspectiva Futura y Desafíos

Aunque el programa muestra éxitos notables, persisten desafíos. El crédito fiscal por inversión expira el 31 de diciembre de 2026, creando incertidumbre para la planificación a largo plazo. Los defensores de la industria abogan por una extensión hasta al menos 2029 y una expansión para incluir el diseño de semiconductores a través de la propuesta STAR Act.

La BASIC Act aumentaría aún más el crédito del 25% al 35% para mantener la competitividad estadounidense. 'Necesitamos pensar más allá de solo las instalaciones de producción,' argumenta la Dra. Chen. 'Los costos de diseño para chips avanzados han alcanzado los $725 millones. Necesitamos apoyo integral en toda la cadena de valor de los semiconductores.'

Con proyecciones que indican que EE.UU. podría alcanzar el 28% de la capacidad mundial de chips lógicos avanzados para 2032, el programa de estímulo de semiconductores representa una de las iniciativas de política industrial más exitosas en la historia reciente de Estados Unidos.