
Masiva incautación de cocaína en principal centro de drogas europeo
En una operación a gran escala contra el narcotráfico internacional, las autoridades belgas han arrestado a diez personas, incluidos siete ciudadanos neerlandeses y tres belgas, durante un importante decomiso de drogas en el puerto de Amberes. La operación, llevada a cabo en las primeras horas de la mañana del domingo, resultó en la incautación de aproximadamente 1.200 kilogramos de cocaína de alta pureza con un valor estimado en la calle de más de 50 millones de euros.
Descubierta sofisticada operación de contrabando
Las drogas fueron descubiertas a bordo de un buque de carga que había llegado desde un país africano no especificado, una ruta que los traficantes utilizan cada vez más para evitar la detección. Las agencias de aplicación de la ley, incluida la policía de Amberes, la policía marítima y la Dirección de Unidades Especiales (DSU), una unidad de intervención de élite de la policía federal, rastrearon el cargamento desde su llegada hasta su transferencia a un almacén en la región de Zelzate cerca de la frontera neerlandesa.
Menor arrestado destaca tendencia preocupante
Entre los arrestados se encontraba un menor belga de 14 años, lo que subraya la preocupante tendencia de las organizaciones criminales que explotan a jóvenes vulnerables en operaciones de drogas. El puerto de Amberes se ha convertido en un punto crítico para los llamados "extractores", a menudo menores reclutados por sindicatos del crimen organizado para extraer drogas de contenedores marítimos.
Lucha continua contra el narcotráfico portuario
Según estadísticas recientes, solo en los primeros cinco meses de 2025, 140 extractores han sido arrestados en el área portuaria de Amberes. Alarmantemente, la mitad de los arrestados eran de nacionalidad neerlandesa, incluidos veinte menores. Este patrón refleja tácticas utilizadas en otras actividades criminales donde los jóvenes son empleados como mano de obra barata y desechable con graves consecuencias legales si son capturados.
Los infractores adultos enfrentan penas particularmente severas en Bélgica, con sentencias de prisión promedio de 40 meses por delitos de extracción de drogas. La ubicación estratégica de Amberes, el segundo puerto más grande de Europa, lo convierte en un objetivo principal para los cárteles internacionales de drogas que buscan distribuir narcóticos por todo el continente.
Cooperación internacional y aplicación de la ley
La exitosa operación demuestra una mejorada cooperación entre las agencias de aplicación de la ley belgas y neerlandesas en la lucha contra el narcotráfico transfronterizo. Ambos países han intensificado sus esfuerzos para desmantelar redes criminales que explotan la infraestructura portuaria europea para la distribución de drogas.